Cuando este impedimento se vuelve permanente, la persona no puede llevar a cabo ningún tipo de actividad laboral y es por ello que se hace necesario el tener que solicitar una pensión por incapacidad laboral.
Como todo lo que tiene que ver con la burocracia, estos trámites a veces son complejos y lentos, por lo que para poder tener la mejor garantía de éxito y poder disfrutar de la prestación cuanto antes con total seguridad, lo mejor es contar con los servicios de unos abogados incapacidad permanente, especialistas en el caso como por ejemplo el despacho Perez y Bravo.
Qué es y cuales son las causas de la incapacidad permanente
La incapacidad permanente es la situación en donde un trabajador cuenta con una lesión o enfermedad que le afecta de forma negativa a la hora de desempeñar su trabajo de forma permanente. Es importante diferenciar una lesión temporal de una permanente, puesto que cuando ya estamos hablando de permanente, es porque se considera irreversible y hace que sea imposible la incorporación de nuevo al trabajo.
Para poder dictaminar esta incapacidad permanente tiene que haber una valoración médica que realmente dictamine que efectivamente, la persona es incapaz de trabajar. A partir de ese momento, es donde se deben de empezar a llevar a cabo todos los trámites necesarios para solicitar la incapacidad laboral.
¿Por qué es recomendable contar con unos buenos abogados?
Una incapacidad permanente es algo que no le gusta al estado. Si vives en Sevilla unos de los mejores abogados en Sevilla con los que puedes contactar es con el despacho de Pérez y Bravo ya que son especialistas en tramitar estas prestaciones por incapacidad permanente.
Existen varios tipos de incapacidad permanente, teniendo en cuenta la gravedad de la enfermedad o lesión, aspecto que se refleja en la disminución del porcentaje en cuanto al desempeño del trabajo se refiere. Para poder conseguir aquella incapacidad que resulte más acorde a nuestro problema, lo más importante es estar bien representado con un buen despacho de abogados que pueda defender nuestros intereses para que no nos quedemos con aquella prestación que no nos corresponda, tan solo porque el estado quiera ahorrarse algo de dinero.
Además de esto, un buen despacho de abogados nos ayudará a llevar a cabo todos los trámites de forma correcta. Esto es importante ya que muchas veces y ante las trabas que suele poner el estado ante este tipo de prestaciones, los tiempos son largos y costosos, por lo que lo más importante para la persona es poder descansar de su enfermedad y no tener que estar preocupado por otros males mayores, dejando a los profesionales en la materia que se encarguen del asunto.
En definitiva, estos abogados son la mejor garantía de poder conseguir esta prestación por incapacidad permanente de la forma más efectiva, defendiendo siempre nuestros intereses y representándonos de la mejor forma ante todas las adversidades que podamos sufrir durante el proceso.
