En todas las ciudades españolas se produjeron descensos en los precios, salvo en Castellón y Valladolid, ciudades en las que los precios aumentaron en un 21% y un 13% respectivamente.
En algunas ciudades las caídas fueron bastante notables. Es el caso de Cádiz, donde dormir es un 19% más barato, Huesca, donde descienden un 15%, o Barcelona, donde lo hacen un 11%. En los casos de Valencia, Sevilla, Logroño y Madrid, los precios se reducen un 9%, mientras que los de Lleida y Zaragoza, en un 8%, y los de Las Palmas de Gran Canaria y San Sebastián, un 7%.
A pesar de estas caídas generalizadas en los precios, las ciudades más caras rondan e incluso superan la barrera de los 100 euros por noche, como durante el resto del año. En diciembre la ciudad más cara es Palma de Mallorca, con un precio medio de 111 euros. A continuación se encontrarían Barcelona, con un precio de 101 euros, San Sebastián, con 99 euros, y Segovia, donde alojarse cuesta 92 euros de media.
En el lado opuesto está Murcia, que es la ciudad española con los hoteles más baratos, con un precio de 54 euros de media. Le siguen Zaragoza, donde los hoteles registran una media de 57 euros, los de A Coruña y Lugo, donde dormir vale 58 euros, y los de ALicante, de 59 euros.
En cuanto a las principales capitales europeas, también hay un descenso generalizado en los precios, en especial en Estambul y Bruselas, ciudades en las que es un 12% más barato este mes, en Turín, un 11%, en Milán, Ámsterdam y Estocolmo, un 8%, y en Londres, Venecia y Atenas, un 7%.
Las excepciones a estas bajadas en los precios son los principales destinos de invierno del centro y norte de Europa, que ven como sus precios hoteleros aumentan de forma considerable. Es el caso de Riga, con un incremento del 32%, Dresde, donde los precios se elevan en un 22%, o Salzburgo, donde lo hacen en un 16%.
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